Hemos traído al pódcast temas vinculados a la autoestima numerosas veces. Se trata de un tema tan transversal y relevante que nunca será suficiente acercarnos a esta realidad.
Hoy lo tratamos desde la perspectiva de la atelofobia: miedo a no ser suficiente. Se trata de un miedo común del que nos va a hablar Ana, psicóloga de Madrid y compañera del equipo de Somos Estupendas.
¿Qué es atelofobia?
La atelofobia es el miedo a ser una persona imperfecta. Es sufrir un miedo irracional de no alcanzar la perfección, de no ser nunca suficiente. Sentir que nunca das la talla y esperar de ti algo imposible e inalcanzable trae miedo al fracaso y grandes malestares psicológicos y puede afectar negativamente en tu vida diaria y en tus relaciones personales.
Las consecuencias pueden ser que pierdas muchas cosas valiosas, incluso que no descubras ciertas partes de ti por miedo a enfrentarte a situaciones que te asusten, haciendo que las evites.
En algún momento todas las personas pueden haber sentido este miedo. Somos seres sociales, vivimos en sociedad. Estamos todo el rato interactuando con los demás. Por lo tanto, que aparezca ese miedo a no ser suficiente o a no cumplir lo que el otro espera de mí es frecuente.
Pero, ¿de dónde viene la atelofobia, el miedo a no ser suficiente? ¿De dónde vienen esas expectativas que nos imponemos? Lo podemos dividir en dos orígenes:
- A nivel individual: los aprendizajes desde la infancia y adolescencia con nuestro entorno directo. Lo que hemos aprendido que esperan nuestros padres o amistades, cómo reaccionaban ante nuestras acciones. Lo que hemos experimentado sobre las expectativas y presiones que se nos han puesto, puede derivar en rasgos de personalidad como el perfeccionismo.
- El sistema en el que vivimos: no solo nos influencia nuestra familia y amistades. A nivel estructural, vivimos en una sociedad muy competitiva que favorece que nos angustiemos por ser nuestra mejor versión constantemente.
Sentir que no eres suficiente para alguien
Podemos ser nuestra mejor versión dependiendo de las circunstancias y no tanto de nosotras mismas. A veces somos muy poco amables con nosotras o con las demás y nos olvidamos de la situación. No tenemos en cuenta que lo que nos sucede también nos influencia y que no tenemos el control total de todo.
No es lo mismo estar en una situación donde se valora la intelectualidad y sentir que tienes que cumplir esa expectativa, que en un espacio seguro con gente que sabes que no te juzga. Insistimos en que es normal sentirse así, porque tenemos que poder validar esas emociones. Ya suficientemente doloroso es sentir miedo a no ser suficiente, como para añadir la culpabilidad por sentirlo.
Sentir miedo a no ser suficiente para alguien, o sentir que eres inferior a la otra persona, o ese puesto de trabajo, etc. puede hacer que toleres más de lo necesario. Cuando tenemos miedo al rechazo aceptamos cosas que no merecemos.
Miedo a no ser suficiente para alguien
Pensemos un poco más concretamente en la atelofobia y el miedo a no estar a la altura, para alguien de nuestro entorno o en alguno de nuestros ámbitos de la vida. ¿Es posible que ese miedo tenga una función? En ocasiones los miedos nos tratan de proteger de algo.
Por ejemplo, a nivel laboral tenemos el famoso síndrome de la impostora. El síndrome de la impostora no es una patología, no significa que tengas ningún trastorno. Habla de cómo te sientes y qué te sucede en un entorno concreto. Si tienes una dificultad en un entorno concreto ahí es donde toca hacer un trabajo terapéutico.
Imagina una araña construyendo su tela para darle un sostén a sus crías. Decide construirla en un árbol y cada vez que cae una pequeña hojita en su telaraña, va corriendo a reconstruirla de nuevo. Su telaraña tiene que estar perfecta para cuando lleguen sus crías. ¿Qué pasa que cuando esas crías llegan si ella sigue enfocándose en reconstruir? Ocupa todo su tiempo en la tela, en evitar el malestar que le genera que no esté bien hecha.
El objetivo de la tela de araña era proteger a sus crías, y finalmente las ha abandonado por seguir evitando el malestar de tener una tela de araña imperfecta.
La araña no podía aceptar el miedo como parte de ella, y dedicaba muchos esfuerzos a evitar esa emoción. Y eso hace que nos perdamos muchas cosas importantes de nuestra vida.
Miedo a no ser suficiente para mi pareja
Si lo enfocamos en las relaciones de pareja, también hay mucho miedo a no ser suficiente, miedo a no estar a la altura. Pero la inseguridad en la pareja también puede venir por otros motivos. No todos los vínculos nos van a tratar de la misma manera y es importante entender también por qué puedes estar sintiendo inseguridad en tu relación.
¿Quizá sientes inseguridad porque no te están ofreciendo una base sólida en la relación? Igual el miedo trata de protegerte ante determinados vínculos que no tienes que sostener o mantener. Si alguien te trata mal, te juzga o te trata con dureza no pienses que la culpa es tuya. No mereces que utilicen el miedo para hacerte daño.
Es muy distinto si la presión te la pones tú o si es otra persona que tiene expectativas excesivas sobre ti. Podéis hablar de qué expectativas tenéis y ver hasta qué punto las podéis y queréis cumplir, cuidando el vínculo. Pero no podemos hacernos cargo al completo de las expectativas del resto, ni pasar por encima de nuestras necesidades constantemente.
Síntomas de la atelofobia
A continuación te mencionamos cinco síntomas comunes de la atelofobia:
- Autocrítica excesiva: las personas suelen ser muy duras consigo mismas, sintiendo que nunca son “suficientemente buenas”.
- Ansiedad intensa: la idea de no cumplir con ciertos estándares provoca un malestar elevado.
- Miedo al fracaso: evitan situaciones donde perciben que pueden no rendir de manera perfecta.
- Dificultad para tomar decisiones: por miedo a equivocarse, puede resultarles difícil elegir o actuar.
- Procrastinación: retrasan actividades por temor a no cumplir con un resultado “perfecto”.
Eliminar el miedo a no ser suficiente o reducir las expectativas no es algo que podamos cambiar de un día para otro simplemente escuchando un pódcast. No deseamos que sientas frustración ni que pensemos que sea fácil. Al contrario, cambiar estos patrones que tiene que ver con el apego y con cómo nos vemos y nos relacionamos requiere de mucho trabajo personal y en la mayoría de las ocasiones también un acompañamiento profesional.
Si has conectado con esta problemática y te está haciendo sufrir estamos a tu disposición, puedes contactar con nosotras para conocer nuestro servicio de terapia online. Te enviamos desde aquí un fuerte abrazo y recuerda que ya eres una persona merecedora solo por el hecho existir.
Como siempre, gracias por acompañarnos una semana más, nos escuchamos el próximo domingo. Gracias también por vuestras puntuaciones y comentarios en Spotify y en Itunes, eso nos ayuda a crecer.