Cómo combatir el estrés

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Una de las grandes preguntas sobre Salud Mental que se hace la población es cómo combatir el estrés, cómo dejar de sentirlo. Definida como la enfermedad del siglo XXI hace dos años el estrés es algo que está rodeando la pandemia actual. Antes de dar pautas básicas para manejarlo es importante conocer cómo funciona y ser capaces de identificarlo.

Identifica tu estrés

El estrés es una respuesta natural de nuestro organismo ante una “amenaza”. Pero tendemos a pasar de un estrés bueno a uno malo, al ponernos muchas metas, no escucharnos y desconocer nuestros límites. Este estrés se manifiesta de forma más intensa y crónica. Tienes más información en este post en el que hablamos solamente de qué es el estrés

El estrés positivo viene con nosotras por naturaleza, no nos bloquea. No lo identificamos como tal estrés porque lo vivimos en sintonía, aunque sea una situación difícil (por un nuevo trabajo, vivir en un nuevo país). El estrés es NATURAL, pero la cosa cambia según lo gestionemos y canalicemos, pudiendo acumularse y pasar a negativo, una de las frecuentes causas de la ansiedad.

Características del estrés

El estrés envuelve nuestras vidas, tanto en la infancia como en la adultez. Hace 50 años la vida era totalmente diferente: más pausada, sin tanto bombardeo de información. Pese a que existían conflictos familiares, enfermedades, pobreza… no había tanto tiempo para lo superfluo. Se cubrían las necesidades básicas y se daba un espacio para el placer y la diversión. Actualmente cientos de fuentes nos dicen qué hacer, a quién parecernos… Y pocas nos dicen que seamos nosotras mismas, que nos escuchemos primero, que aprendamos a gestionarnos.

La juventud nacida en esta burbuja de información se encuentra sin recursos en un bucle, y la ausencia de recursos causa estrés. Vivimos en la era de la inmediatez: a golpe de clic lo tenemos todo, incluso antes de desearlo. No somos conscientes ni de lo que necesitamos. Tenemos herramientas que nos facilitan la vida, pero realmente nos adormecen los sentidos.

Cuando los deseos se convierten en necesidades básicas no hay lucha posible, porque nada será suficiente, siempre querrás más. Nuestros deseos son ilimitados y la frustración se vuelve terrible. ¿Cuándo conseguirás cubrirlos?

Detecta el límite del estrés

El control interno te permite identificar hasta dónde puedes llegar. Qué puedes realmente hacer y con qué recursos cuentas para llegar a tu meta. Así, una de las principales pautas de autocontrol emocional es saber escuchar tus voces internas. Comprender tu realidad ayudará a eliminar el caos y te permitirá fluir, priorizar y, a veces, renunciar.

El autor Richard Schwartz desarrolló la teoría de los sistemas familiares internos, que afirma que podemos aprender a dejar el caos a un lado para volvernos a centrar. Que podemos, con práctica, aprender a escuchar nuestro yo interno y ayudarlo a que salga de la situación. Una vez identificadas las voces, para poder escucharlas es importante aliarnos con las 8C’s:

• CALMA cuando nos encontramos con nuestras voces.
• CLARIDAD para poder entender el mensaje que nos dan.
• CURIOSIDAD de saber qué mensaje es el que nos quieren transmitir.
• COMPASIÓN hacia la carga que tienen estas voces.
• CONFIAR que estas voces internas están porque tienen una función adaptativa y nos ayudan.
• Tener el CORAJE de descubrir esta función, a veces tememos descubrir estas voces punitivas y exigentes.
• Verlas con un punto de CREATIVIDAD y CONECTARLAS.

Ejercicios y herramientas para combatir el estrés

Visualización

Practica esta visualización para escucharte y promover tu bienestar, autoestima y felicidad:

Cierra los ojos y respira profundamente varias veces. Imagínate en un sendero. Antes de comenzar a caminar reúnete con tus ilusiones y pensamientos y pídeles que se queden al principio del sendero y te permitan caminar sola.

Si estas partes tienen miedo de dejarte sola tranquilízalas y diles que no tardarás y la experiencia puede ser beneficiosa para ellas y para ti. Cerciórate que las partes más temerosas pueden ser atendidas por las otras. Calma los temores que puedan sentir en ese momento si marchas sola. Si te dan el permiso sigue adelante.

¿Te observas a ti misma caminando o si simplemente percibes lo que hay alrededor? Si te observas a ti misma quiere decir que alguna de tus partes sigue contigo, pídele que se relaje y vuelva al punto de partida. Si se niega dedica un tiempo para comprender.

Conforme caminas por este maravilloso lugar observa si te viene algún pensamiento. Pide a los pensamientos que vuelvan a la base. Progresivamente te convertirás en una conciencia plena. Comprueba si estás pensando y llévalo a la base. Nota qué sucede en tu cuerpo y mente cuando estos pensamientos te abandonan. Observa la sensación de amplitud que fluye en ti. Continúa caminando y cuando sientas que ya has estado suficiente tiempo vuelve lentamente. Al regresar conservarás la sensación de amplitud y energía, incluso cuando te aproximes a tus partes.

Observa por qué están ahí, qué función tiene en tu vida, de qué te protegen por qué no te dejan avanzar. Es difícil, pero empieza poco a poco valorando las voces que más gritan: quizá te sientes desprotegida, o que no vas a llegar a todo…

Checklist

¿Cómo combato el estrés de una situación que no puedo cambiar? Responsabilízate de ti. No tienes que hacer todo lo que te dicen que tienes que hacer. Somos Estupendas, pero no somos superwomen, o mujeres orquesta, que puedan con todo. Las personas somos vulnerables por naturaleza, tenemos límites. Compartirlo con una buena amiga es responsabilizarnos, estamos sacando la fuente estresora, verbalizando. Nos han enseñado a no mostrar, a que no noten nuestro estrés, porque somos super efectivas, podemos con todo, hay que rendir, producir.

En resumen, grábate esta checklist para combatir el estrés:

• Reconócelo
• Compártelo, verbalízalo
• Responsabilízate
• Recupera el dominio de tu atención plena

Transforma tu vida y tu felicidad; de una meta a un camino. Esto te permitirá integrar tus voces, escucharte, sentir la auténtica felicidad y disfrutar el camino.

La fábula para perder el miedo y combatir el estrés

En la medida que nos deshacemos del miedo irracional más nos acercamos a nosotras y mejor podemos trabajar el estrés que nos invade. Dejamos este texto para vuestra reflexión. No os preocupéis, el aprendizaje no llega automáticamente, pero poco a poco irá creciendo:

El león y el lago

En una ocasión, un león se aproximó hasta un lago de aguas despejadas y cristalinas para calmar su sed. Al acercarse a las mismas, vio su rostro reflejado en ellas y pensó:

Este lago debe de ser de este león. “Debo tener mucho cuidado con él”.

Atemorizado, se alejó de las aguas, pero tenía tanta sed que regresó. Allí estaba otra vez el león. ¿Qué hacer? La sed lo asfixiaba y no había otro lago cercano.

Retrocedió.

Unos minutos después volvió a intentarlo y, al ver al león, abrió sus fauces de forma amenazadora, pero al comprobar que el otro león hacía lo mismo, sintió terror. Salió corriendo, pero ¡era tanta la sed! Lo intentó varias veces de nuevo y siempre huía espantado.

Pero como la sed era cada vez más intensa, tomó finalmente la decisión de beber agua del lago sucediera lo que sucediera. Así lo hizo. Y al meter la cabeza en las aguas ¡el león había desaparecido!

Gracias por acompañarnos una semana más. Nos escuchamos el próximo domingo. Tenéis más información de la terapia para el estrés en el enlace.

Gracias también por vuestras puntuaciones y comentarios en Spotify, Ivoox y en Itunes eso nos ayuda a crecer.

¡Un abrazote!

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