Cómo prevenir el abuso sexual infantil | Ep. 57

¡Hola bonitas y bienvenidas un domingo más al Podcast de Somos Estupendas! Hoy será un día intenso porque os traemos un tema complicado: cómo prevenir el abuso sexual infantil (ASI). El 20% de la infancia ha sufrido, sufre, o sufrirá abusos sexuales y es importante hablar de ello.

Así que para un tema tan importante nos acompaña Claudia, psicóloga del equipo de Somos Estupendas que ya nos habló en el Podcast de herramientas para supervivientes de ASI. De todos modos, sentíamos que faltaba dedicar un día a hablar de la raíz, de cómo prevenirlo y detectarlo lo antes posible.

Los 4 pilares de la prevención

El 85% de los abusos se dan en el entorno familiar. Si una figura referente y a la que quiere y en la que confía, ¿cómo un menor va a tener la capacidad de sobrepasar ese muro, de reconocer que es algo malo y de contarlo? Por eso es tan importante hacerles saber que tienen apoyo y enseñarles a poner nombre a lo que les sucede a tener intimidad y a conocer sus derechos.

Para ello os compartimos los 4 pilares para saber cómo prevenir el abuso sexual infantil:

Hablar de los secretos

¿Qué es un secreto? La definición está muy en el aire, pero la RAE lo define como “algo oculto, escondido, ignorado y separado de la vista o del conocimiento de los demás”. Esta definición tiene mucha relación con el abuso sexual, porque el abuso sexual se convierte la mayoría de las veces en un secreto.

El tabú del sexo dificulta la detección del abuso sexual infantil.

¿Cómo podemos prevenir algo que se oculta de la vista de los demás? Precisamente hablando de la diferencia entre los secretos buenos y malos.

  • Un secreto bueno puede darnos la sensación de ser especiales para alguien, de complicidad. Un secreto que nos haga sentir sensaciones agradables, que sea divertido. También es importante remarcar que los secretos tienen fecha de caducidad: pueden ser sorpresas que finalmente se descubrirán y podemos explicar.
  • Los secretos malos no nos hacen sentir bien. Hay algo que no nos gusta y nos genera malestar. Aquí debemos hacerles saber que pueden buscar ayuda y explicárselo a mamá, a papá, abuela, profesores… Que si un adulto utiliza el secreto y su autoridad y coacción tengan interiorizado que pueden explicarlo y acudir a alguien.

Crear espacios de comunicación

Con el ritmo de vida que llevamos es complicado buscar momentos de pausa, de calma, de observar a los hijos y escucharlos. Pero es muy importante que tengan eso momento de mirada, de sentir que pueden contar cualquier cosa y serán atendidos y comprendidos. Cualquier momento del día o de la semana es perfecto.

La única persona culpable del abuso es quien lo realiza.

Como es normal en la etapa infantil surgirán muchas dudas, entre ellas dudas sobre sexualidad. La sexualidad adulta no tiene nada que ver con la sexualidad infantil. Son etapas diferentes de un proceso que dura toda la vida. Pero la sexualidad está dentro de sus vidas y necesita ser respetada y atendida. Si les ayudamos a poner palabras a la sexualidad comprenderá mucho mejor lo que le sucede y detectará con más facilidad conductas inadecuadas o dañinas.

Si el niño o niña vive en un entorno donde estos espacios existen y ha podido explicar sus problemas del día a día ayudará a mejorar sus habilidades de comunicación. Así, si sufre un abuso sexual, acudirá con más facilidad a sus adultos.

Respetar sus derechos

Aunque los adultos estemos en un punto de experiencia y conocimientos más avanzado, los niños no dejan de ser personas que merecen respeto. Tienen derecho a su intimidad personal, a conocer cuáles son sus partes íntimas y que son suyas.

Podemos explicarles que todo aquello tapado por la ropa interior son partes íntimas y las personas no deberían tocarle, excepto por cuestiones de higiene o médicas. Incluso en estos casos se puede pedir permiso o dar una explicación.

La prevención y detección de ASI no es solo cosa de progenitores, sino de toda la sociedad.

Que pueda decidir si quiere o no dar muestras de afecto. Si les obligamos a que den besos aprende que su cuerpo no es suyo y que no tiene poder de decisión. Si se les respeta siempre y sufren un abuso sus alarmas saltarán, porque verán que está sucediendo algo diferente y desagradable.

Empoderarles

Si el niño ha sido visto, acompañado y se siente escuchado sentirá que tiene herramientas frente a un posible abuso sexual infantil. En caso de que no lo pueda afrontarlo, tendrá herramientas para compartirlo y pedir ayuda.

Fomentar la autonomía y la alta autoestima es dejar que vayan haciendo solos, aunque sepamos que podríamos hacerlo por ellos y sería más rápido. Dejemos que sientan “wow, he podido” y que vean que sus referentes confían en él/ella.

El sistema en el que vivimos nos obliga y empuja a llevar un ritmo que no nos permite estar plenamente. Cuesta mucho crear estos espacios y más si te atraviesan cuestiones de clase. Por eso queríamos conceder herramientas para aprender sobre este tema tan necesario y lo adaptéis como podáis a vuestra situación familiar.

Aunque sea, ofrécele al menos 5 minutos en el fin de semana para que se sienta visto y escuchado. Parece poco, pero es muchísimo que sientan que valen, que no habrá juicio y que son importantes.

Si te confiesa que sufre abusos, valida el esfuerzo que ha hecho para contártelo, no culpabilices y hazle saber que a partir de ahora le protegerás.

Para que un abuso se pueda cometer necesitamos a un abusador y a toda una sociedad que lo permita.

Para acabar os queremos compartir dos libros muy útiles para trabajar todo lo que hemos hablado en el podcast, uno es El Secret de l’Otus, y el otro es Clara y su sombra. Están dirigidos a los niños y niñas para comprender el abuso sexual infantil y adquirir herramientas.

Cómo detectar el abuso sexual infantil

Ahora que conocemos las bases para poder prevenir el ASI, nos vamos a enfocar en los casos en los que sí que sucede. De todos modos, no nos quedemos ni con la idea y angustia constantes de que va a sucederle a todas las niñas y niños, ni tampoco pensemos que no sucederá nunca. Seamos conscientes de la realidad, de los números, y aprendamos herramientas para adultos y para los menores.  

Apartar la mirada no va a evitar que siga pasando.

Es complicado detectar el abuso sexual infantil, pero no imposible. Hay ciertas señales de alerta que nos pueden hacer sospechar. Atended a vuestros menores si sucede lo siguiente:

  • Si tiene un comportamiento sexual que no es adecuado para su etapa de desarrollo: ya sea a través del lenguaje, de juego simbólico, conductas o dibujos.
  • Si su comportamiento y estado de ánimo cambia de forma abrupta, ya sea para bien o para mal.
  • Alteraciones en su alimentación, higiene, sueño y rendimiento académico.
  • Señales físicas, ya sean marcas de lesiones, autolesiones o dolor.

La sintomatología que aparece tras un ASI es muy variada y puede aparecer en momentos del ciclo vital diversos dependiendo de cada persona. Por ello es más eficaz hablar de cómo prevenir el abuso sexual infantil, interviniendo en los factores de riesgo.

Nunca es tarde para contarlo, pero la intervención y el acompañamiento serán muy distintos si se dan durante la propia infancia o 30 años después de los abusos. Intervenir durante la infancia ayudará a que no haya tantas interferencias en el desarrollo y reducirá la probabilidad de trauma emocional.

Enhorabuena por haber llegado hasta este punto del podcast, sabemos que son conversaciones incómodas, pero que deben continuar siendo visibles. Por ello, si conoces alguien que esté en una situación relacionada o que pueda beneficiarse de este podcast házselo llegar.

Como siempre, gracias por acompañarnos una semana más, nos escuchamos el próximo domingo. Gracias también por vuestras puntuaciones y comentarios en SpotifyIvoox y en Itunes eso nos ayuda a crecer.

¡Un abrazote!

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Humana en constante aprendizaje y evolución, además de cofundadora y CEO de Somos Estupendas y futura psicóloga.

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