El brote psicótico no es una entidad nosológica, sino que constituye una sintomatología común a varias entidades psiquiátricas. El brote psicótico puede ser definido como una alteración grave en el juicio de la realidad que se asocia con la presencia de delirios, alucinaciones y cambios de conducta, que van des de la agitación psicomotora hasta el estupor catatónico.
Tipos de brotes psicóticos
En primer lugar, es importante hacer referencia a la predisposición genética. Esta, unida a algunos factores ambientales, puede hacer que se genere un brote psicótico.
También pueden aparecer en personas diagnosticadas de esquizofrenia o de trastorno paranoide, sobre todo cuando dejan de tomarse la medicación que tienen prescrita. De igual forma, en personas que sufren un trastorno bipolar, o trastorno límite de la personalidad.
Sin embargo, un brote psicótico no aparece con exclusividad en personas con antecedentes de salud mental. En personas que no tienen ninguno de los trastornos mencionados anteriormente, puede aparecer un brote psicótico de manera puntual. Las causas de estos brotes psicóticos han sido relacionadas con diversos factores. Entre los más frecuentes se encuentran los siguientes: foco de estrés de intensidad elevada o mantenido en el tiempo, sobreexposición emocional, vivencia de un acontecimiento traumático, ansiedad y consumo de sustancias psicoactivas.
Nos centramos en algunos de ellos para explicarlos con mayor detenimiento.
Brote psicótico por ansiedad
Cuando el estrés es continuo y provoca un elevado malestar emocional, como sintomatología ansiosa, puede poner en riesgo la salud mental.
La ansiedad, experimentada de manera muy intensa, no solo puede causar miedo, sino que también conlleva otros síntomas que pueden provocar una sensación de volverse loco, como si se estuviera perdiendo el contacto con la realidad. En la mayoría de los casos, esto acaba siendo solo un sentimiento. Pero, en cambio, estos síntomas de la ansiedad pueden asemejarse a ciertos pensamientos psicóticos. Uno de los síntomas que puede conllevar la ansiedad extrema, son las alucinaciones.
A pesar de que las alucinaciones por ansiedad no suelen ser muy comunes, la realidad es que el estado hiperalerta o distraído debido a este trastorno puede conducir a experimentarlas en los casos más extremos. En estos casos, tratar la ansiedad es la única manera de prevenir y reducir estas alucinaciones.
Brote psicótico por consumo de drogas
Cuando hablamos de droga, lo hacemos equiparando el concepto al de sustancia psicoactiva. Esta hace referencia a toda sustancia que introducida en el organismo, por cualquier vía de administración, produce una alteración del funcionamiento del sistema nervioso central y es susceptible de crear dependencia, ya sea psicológica, física o ambas. Además, las sustancias psicoactivas, tienen la capacidad de modificar la conciencia, el estado de ánimo o los procesos de pensamiento de la persona que las consume.
Uno de los factores precipitantes más habituales de los brotes psicóticos es el consumo de sustancias psicoactivas por un tiempo prolongado. Las personas que presentan adicción a cocaína, cannabis o alucinógenos, entre otras drogas similares, son pacientes habituales que sufren estos brotes. En ocasiones, también se presentan en personas que solo han realizado un consumo puntual de estas sustancias.
De hecho, entre los individuos que cumplen con los criterios diagnósticos para un trastorno de consumo de drogas, la tasa de comorbilidad con un trastorno psicótico es del 7 %.
Brote psicótico por consumo de alcohol
Dentro de las sustancias psicoactivas, prestamos especial atención al alcohol, sustancia legal en la que su consumo se relaciona frecuentemente con un primer brote psicótico. Dicho consumo se ha relacionado también con un peor pronóstico de la enfermedad y una mayor severidad de los síntomas.
Los episodios de psicosis inducida por sustancias son frecuentes en los servicios de urgencias y los centros de crisis. Para que se considere un brote psicótico inducido por sustancias, las alucinaciones y las ideas delirantes deben ser superiores a las que normalmente acompañan una simple intoxicación o abstinencia de sustancias, aunque el paciente también puede estar intoxicado o sufriendo la abstinencia.
Brote psicótico por depresión
En algunos casos de depresión severa es posible experimentar otros síntomas asociados a la psicosis, que se suman a los síntomas habituales de la depresión. Es lo que conocemos como psicosis depresiva o depresión grave con características psicóticas. Esta puede ser considerada un subtipo de episodio depresivo mayor, y también puede aparecer en el contexto de un trastorno bipolar.
Implica alucinaciones, así como delirios, que hacen que la persona pierda el contacto con la realidad. Estos a menudo están relacionados con los motivos de la depresión. Algunos ejemplos pueden ser voces que le dicen a la persona que no tiene ningún valor o delirios en forma de sentimientos intensos, de inutilidad y fracaso. También pueden directamente provocar en el paciente una ruptura total con la realidad.
Brote psicótico por estrés
El estrés es uno de los desencadenantes más comunes de un brote psicótico. Clínicamente, se denomina como “psicosis reactiva breve”. Este diagnóstico se realiza cuando es muy evidente que una situación puntual o prolongada de estrés intenso ha sido la causa de la alteración.
Para que aparezca un brote psicótico por estrés, suele ser necesario que el individuo presente algún grado de predisposición genética. Por ello, se considera que el estrés actúa más como un factor precipitante o agravante que como una causa directa en la mayoría de casos diagnosticados.
En esta línea es importante mencionar el modelo de vulnerabilidad, entendida esta como la predisposición a desarrollar un episodio esquizofrénico cuando las circunstancias vitales (tanto externas como internas) producen el suficiente grado de estrés que supera (el umbral) la tolerancia al estrés de una persona”.
Este mismo modelo plantea que toda la población tiene un determinado grado de vulnerabilidad, pero que solo se traducirá en un brote psicótico ante determinadas circunstancias.
Si te encuentras atravesando por alguna de estas situaciones, lo mejor sería poder iniciar un proceso de terapia psicológica. Igualmente, recuerda lo valiente que estás siendo y que estamos aquí para ayudarte.