¿Sabías que más de la mitad de la población hizo alguna apuesta durante el 2024? La ludopatía es una enfermedad muy grave. Cada vez hay más personas con problemas de adicción a los juegos de azar. En este artículo explicamos los principales síntomas de la ludopatía. Esto nos va a permitir poder identificarlos y pedir ayuda cuanto antes. La intervención es crucial y, por eso, también hablaremos del tratamiento.
Sabemos que en los últimos años se ha detectado un aumento considerable del número de jóvenes que juega y apuesta por internet. Esta situación nos preocupa y alarma a partes iguales y, por eso, hemos querido dedicar también todo un apartado a este tema.
Síntomas de la ludopatía o adicción al juego
La adicción al juego daña a las personas que lo sufren e interfiere en todos los ámbitos de su vida. La ludopatía se manifiesta de diferentes formas. Los síntomas se suelen dividir en diferentes grupos. A continuación nos centraremos en los aspectos que podemos observar a nivel conductual, lo que le sucede a las personas a nivel emocional y también mental.
Síntomas conductuales
Este grupo es, probablemente, el que más personas conozcan. Al pensar en cómo identificar los síntomas de la ludopatía, probablemente pensamos en acciones. La adicción al juego lleva a las personas a adoptar conductas y actitudes que les ponen en riesgo y les acaban dañando en todos los aspectos de su vida.
Si nos centramos en los aspectos individuales, el síntoma de la ludopatía que todas las personas tenemos en mente es la impulsividad. Esta se traduce en incapacidad para frenar el impulso de jugar o apostar. Además, también se dan dificultades para controlar otros aspectos del juego como la frecuencia, la intensidad y la duración. Debemos tener en cuenta que, aunque hablamos de impulsividad, la ludopatía es una adicción y no un trastorno de control de impulsos.
Por otro lado, como vemos en muchas otras adicciones, las personas con ludopatía intentan dejar de apostar y jugar muchas veces. Pero no lo consiguen. Como consecuencia, sienten un profundo malestar que habitualmente les lleva a mentir y ocultar información importante a las personas de su entorno.
El juego y/o las apuestas se vuelven el centro de atención de sus vidas y esto les lleva a descuidar sus responsabilidades del día a día. No solo eso, sino que también dejan de hacer aquellas actividades que antes eran agradables. Otra señal de alarma es que siguen jugando a pesar de las pérdidas y sus consecuencias.
Síntomas emocionales
Todo lo que tiene que ver con las emociones es, habitualmente, más difícil de observar. Si la persona afectada no explica cómo se está sintiendo, puede que se nos escape mucha información importante. Sin embargo, si conocemos lo que sucede habitualmente, quizá es más fácil detectarlo.
Podríamos decir que uno de los síntomas de la ludopatía que se da con más frecuencia es la ansiedad. Esta se produce cuando intentan dejar de jugar. Además, las personas con ludopatía suelen estar muy irritables cuando no tienen la opción de jugar o apostar. Aunque normalmente predomina la euforia mientras están jugando, cuando pierden les invade la vergüenza, la culpa y la frustración.
Todo esto les lleva a ir alejándose de sus seres queridos poco a poco y estar más aislados socialmente cada vez. Esto se convierte en un «caldo de cultivo» para acabar desarrollando otras problemáticas graves de salud mental como la depresión.
¿Sabías que la ludopatía y la dependencia emocional están relacionadas? Aunque quizá a simple vista no lo parezca, así es. En ambas hay dificultad para hacer frente a las emociones desagradables y para controlar los impulsos. Además, en las dos situaciones hay una tendencia a buscar gratificaciones externas de forma rápida.
Síntomas cognitivos o mentales
Para cerrar el apartado, hablaremos de los síntomas de la ludopatía que tienen que ver con lo que sucede a nivel mental. Tal y como sucedía con los emocionales, estos también son más difíciles de detectar si la persona no los expresa. De nuevo, cuanta más información tengamos, más señales de alerta podremos intuir o reconocer.
El principal problema que se da en este sentido es que las personas procesan cierta información de forma errónea. Por ejemplo, suelen pensar que están a punto de ganar constantemente y eso les lleva a seguir jugando y apostando. Otro pensamiento erróneo y habitual es que cuanto más apuesten, antes podrán recuperar todo lo que han perdido. En psicología, llamamos a este proceso distorsión cognitiva.
Pero esto no es todo. Estos fallos en el procesamiento de la información llevan a las personas a sentir que tienen el control de la situación. Aunque esta percepción es falsa, ellos así lo experimentan. Por eso es tan difícil para ellas asumir que tienen un problema. Tienden a minimizarlo o negarlo la mayor parte del tiempo. Al hablar de los síntomas de la ludopatía que se dan a nivel cognitivo, el juego ocupa la mayor parte de su espacio mental.
Tratamiento de la ludopatía
Seguro que has escuchado más de una vez que para superar una adicción solo hace falta tener fuerza de voluntad y un buen autocontrol emocional. Aunque es una visión reduccionista, durante muchos años las adicciones se han tratado solo desde el punto de vista de la conducta. La terapia cognitivo conductual ha sido una de las intervenciones más populares en psicología para el tratamiento de la ludopatía.
Sin embargo, esta afirmación es falsa. Hoy día sabemos que las personas no las desarrollan por una simple falta de voluntad o fortaleza. Los seres humanos somos la suma de muchos factores y eso nos hace complejos. Por suerte, cada vez sois más las personas conscientes de esto que buscáis profesionales con enfoques integradores para que os acompañen en vuestros diferentes procesos.
¿Qué necesitamos entonces para que el tratamiento de la ludopatía funcione? Lo primero de todo, es que se adapte a las necesidades de cada persona. Además, suelen intervenir diferentes profesionales y es importante que se coordinen entre ellos. De esta forma podemos garantizar que la persona está siendo atendida en todas las esferas. Recordemos que la adicción al juego no afecta solo a la persona, también puede interferir en su entorno. En este sentido, se ha demostrado que las terapias grupales dan muy buenos resultados.
Ludopatía en jóvenes
Sabemos que las personas que tienen entre 15 y 34 años son las que más apuestan en la modalidad online. Quizá te estás preguntando cómo es posible que menores de edad entren en las estadísticas. Y sí, la realidad es que los datos son alarmantes y la facilidad para acceder a este tipo de juego es inquietante.
Como sociedad jugamos un papel importante en todo este tema. Hoy en día, hay muchos aspectos culturales que relacionan el juego con la diversión y el éxito. Esto hace que los jóvenes normalicen esta actividad y la vean menos peligrosa de lo que realmente es.
Recordemos que la juventud es una etapa en la que necesitamos explorar el mundo. Además, como el cerebro todavía se encuentra en desarrollo hay más impulsividad y más necesidad de vivir emociones intensas que en la adultez. A esto le sumamos que la capacidad de pensar en las consecuencias es menor.
Las personas con problemas emocionales (baja autoestima, ansiedad, depresión, etc.) tienen una mayor vulnerabilidad. Si las consecuencias de la ludopatía ya son graves, ¿imaginas cómo puede complicarse en estos casos? Por eso, es un verdadero peligro que el acceso a las plataformas de juegos y apuestas online sea tan fácil.
Fuentes:
- American Psychiatric Association. (2013). Diagnostic and statistical manual of mental disorders (5th ed.). Arlington, VA: American Psychiatric Publishing.
- Organización Mundial de la Salud. (2019). Clasificación Internacional de Enfermedades (11.ª revisión). Recuperado de https://icd.who.int/es
- Organización Mundial de la Salud. (2024, 2 de diciembre). Juegos de azar y de apuestas. Recuperado de https://www.who.int/es/news-room/fact-sheets/detail/gambling