Cómo gestionar el rechazo

Hola bonitas y bienvenidas un domingo más al podcast de Somos Estupendas. Habréis quizá escuchado ya nuestro podcast sobre la herida de abandono y del miedo al rechazo. Pero nos faltaba hablar sobre cómo gestionar el rechazo en la edad adulta.

Desglosaremos un poco más qué entendemos por rechazo, que para cada persona puede ser distinto. Y para ello nos acompaña Isa, psicóloga veterana del equipo que segurísimo ya habréis visto en muchos otros podcast.

Qué es el rechazo

Podríamos hablar de que el rechazo es lo contrario a ser aceptada. Rechazar a alguien es una forma implícita o explícita de trasladar la idea o el mensaje de que no te quiero. Cuando rechazamos algo es porque no lo queremos.

La experiencia subjetiva de sentir rechazo es precisamente sentir que no te quieren, que no te aceptan, que no tienes lugar en un espacio concreto o en el mundo en general. Y esto acaba siendo algo tremendamente doloroso, no sentir que mereces ese cariño y aceptación.

El rechazo puede darse en cualquier ámbito de la vida y con cualquier persona: con familia, amistades, pareja, en contexto laboral, en contexto de ocio, en contexto íntimo o sexual… Sentir rechazo acaba modificando nuestras estructuras sobre cómo vemos el mundo, nuestro diálogo interno, cómo somos y cómo nos relacionamos.

¿Por qué me cuesta tanto gestionar el rechazo?

Una de nuestras necesidades más humanas y básicas para nuestro bienestar y supervivencia es ser aceptadas, queridas, valoradas… y sentir que formamos parte de algo. Si el sentimiento de pertenencia se ve amenazado de la forma que sea acaba por generar una brecha enorme en nuestro ser: construimos nuestra identidad en base a la experiencia, así que me veré según yo haya sido mirada.

Por eso nos cuesta tanto gestionar el rechazo, porque incluso nos acabamos culpando de que nos rechacen. El sentimiento de culpa y los patrones se aumentan y se perpetúan. Caes en la trampa en la que gestionar ese rechazo acaba siendo el mismo problema que te acaba llevando a ser constantemente rechazada. Y te confirmas a ti misma que es tu culpa.

Si en tus experiencias de infancia y adolescencia con tus figuras referentes, en las que más has confiado, has sido rechazada, la herida acaba por hacerte creer que mereces lo que te ha sucedido. De aquí aparecen también los tipos de apego.

Consecuencias del rechazo

Experimentar rechazos puede afectar a nivel emocional, cognitivo y físico. Cala en lo más hondo de nuestro ser. Cuando el rechazo se da en la infancia estamos en un momento muy vulnerable en el que todos nuestros esquemas mentales se están construyendo. Nuestra estructura y andamiaje se ve impactada e influenciada, moldeando nuestra identidad y favoreciendo una visión negativa de nosotras mismas y una baja autoestima.

Si no sabes cómo gestionar el rechazo puedes sentir que mereces estar en vínculos inseguros de manera que será más probable vivir otras experiencias de rechazo, retraumatizándonos. El miedo al rechazo hace que te comportes de forma retraída y que evites contextos sociales, facilitando el aislamiento y las dificultades para relacionarte y sentirte aceptada. Tú misma te rechazas a ti.

Cómo gestionar el rechazo

Llegado este punto quizá te preguntes cómo gestionar el rechazo. Quizá te has identificado con el sentimiento de rechazo en tu vida en general o en algún punto concreto. Hemos visto las sombras, ¿qué hacemos?

Identifica la herida

La recomendación del primer paso siempre va a ser comprender qué te sucede y de dónde viene todo esto. Si no comprendemos las raíces del rechazo será muy difícil disminuir el malestar, y un dolor tan profundo va a seguir controlando nuestras conductas. Pregúntate cuándo fue la primera vez que sentiste ese rechazo.

Es mejor que tengas ayuda psicológica porque es un dolor muy hondo. Necesitas elaborar internamente ese dolor, poder entrar en contacto con él. Trata de hacer un mapa de esa herida. ¿Cuántos años tiene esta herida? ¿Cómo es? ¿En qué momentos la siento?

Deja que se instalen creencias nuevas

Una vez identificada, se puede empezar a construir qué hacer a partir de ahora. El camino será poder cambiar creencias limitantes que tienes sobre ti y reemplazarlas por otras más coherentes y respetuosas con quién eres tú.

No podemos obviar que esto no es un trabajo en solitario y que tampoco será suficiente solo con ir a terapia. Poco a poco tendrás que darte permiso de estar en contextos sociales y que sean seguros para ti. Hacer amistades, tener pareja, mantener vínculos que puedan ser una experiencia emocional, sana y correctiva para ti. Que te hagan dudar de esa creencia de que mereces cosas malas.

Como siempre, gracias por acompañarnos una semana más, nos escuchamos el próximo domingo. Gracias también por vuestras puntuaciones y comentarios en Spotify y en Itunes, eso nos ayuda a crecer.

Humana en constante aprendizaje y evolución, además de cofundadora y CEO de Somos Estupendas y futura psicóloga.

4 comentarios en «Cómo gestionar el rechazo»

  1. Gracias por toda esta informacion!!
    desgraciadamente estoy pasando por un engano en estos momentos.
    Es duro estoy literalmente destrozada.

    Responder
    • Hola🌷
      Antes de nada, muchas gracias por tu confianza y valentía al compartir esto con nosotras. Lo apreciamos mucho. Sentimos mucho, de todo corazón, que te estés sintiendo así y entendemos que está siendo muy duro para ti❤️‍🩹 Queremos decirte que no tienes porqué saber o poder gestionar esto sola, sino que tienes derecho a tener una ayuda y acompañamiento. Si sientes que necesitas ayuda, estaremos encantadas de dártela a través de nuestra terapia.
      Te abrazamos fuerte🫶🏼

      Responder

Deja un comentario